martes, 23 de noviembre de 2010

ALBAMAR

Estos son un par de poemas que ALBAMAR, profesora de Español del Colegio Berchmans,  escribió para su trabajo en el aula con los niños de Primero.  Los acompaña uno de los dibujos realizados por los niños durante nuestro encuentro de Noviembre. El tema: Cómo se imaginaban la Lechuza del cuento de Gregorio.  


 EL REGRESO DE GREGORIO


Este era un singular monito

que no sabía callar

y en su bosque primoroso

siempre ruido solía provocar.


Pero un buen día cualquiera

y cansado del buen trato,

aunque nadie lo creyera

decidió irse el ingrato.


A la ciudad se marchó

en busca de nuevos amigos

y un gran fiasco se llevó

por su inmenso desatino.



El pobre recogió sus trastes

y a su casa regresó

y al ver tan grande contraste

apenado se sintió.


Pudo entonces ver todo lo que tenía;

sus amigos, su hermoso hogar,

su gente que lo quería y a quienes

aprendió a escuchar con respeto y mucha alegría.

                                                           ALBAMAR


INVITACIÓN


Hoy a la señora Lechuza,

yo le quiero comentar

que Gregorio el monito bulloso

ya ha aprendido a escuchar,

a valorar a los amigos,

a ser amable y a callar.



Por eso mi señora,

hoy yo la quiero invitar,

a abrir su ventanita y

a construir la amistad

con sus vecinos del bosque

que la quieren saludar.

                          ALBAMAR

                                                         ALEJANDRO ZAMBRANO (1E)

martes, 16 de noviembre de 2010

¿Qué hace tan interesante a un libro ilustrado?...

...Lo que se expresa en lo no dicho con palabras, en los silencios que genera, en ese “mostrarnos” la parte de un todo que permite dejar a la imaginación la construcción del resto de la historia.



Dice Roland Barthes en su artículo “Retórica de la Imagen”: “son pobres las concepciones que tienen tanto los lingüistas como la opinión común al considerar la imagen como una “comunicación por analogía”, o una mera re-presentación de la vida”. La imagen puede ser considerada, como el lenguaje, un sistema normal cuyos signos provienen de un código cultural (aún cuando la relación de los elementos del signo parezca ser más o menos analógica) “Lo que constituye la originalidad del sistema, es que el número de lecturas de una misma lexía (de una misma imagen) varía según los individuos…” “…Sin embargo, la variación de las lecturas no es anárquica, depende de los diferentes saberes contenidos en la imagen (saber práctico, nacional, cultural, estético…en el caso de la imagen publicitaria analizada en el texto)”


En el caso de los libros ilustrados, de aquellos que logran generar significaciones, las posibilidades de creación son innumerables. En efecto, su lectura puede traernos memorias, provocar emociones, generar ideas, plantear preguntas, establecer relaciones no vistas antes, crear historias. Cuántas conexiones y posibilidades narrativas se pueden suscitar a partir de una historia narrada en imágenes.